jueves, 14 de mayo de 2009

caperucitas

consigna: reescribir en verso "caperucita roja" tal como la recuerde.

caperucita uno

Delicada florcita del bosque
con su capa roja y tierna
esta es la historia de la niñita chiquita
a quién todos llamaban caperucita.
Caminaba sola, cantando alegre
rumbo a la casa de su abuelita.
Camina, camina sin detenerte
el camino es corto y si te apuras
llegaras temprano mi bella niñita.
Pero no escucha LA VOZ DE SU MADRE
se pierde entre flores, suspiros y sueños.
La tarde la atrapa
el bosque oscurece.
Se rompe el silencioçen un grito extraño.
Un alarido, un trueno
un lobo la acecha
y nada sospecha
la inocente niña
llega fatigada a la casa
de su abuelita.
El malvado lobito
la engulle a la niña.
Un viento despiadado
con olor a muerte y venganza...
El cazador lo sospecha
llega a la cabaña
clava su cuchillo
da muerte a la fiera.
Salen cantando
abuelita y la niña.
Los arboles cantan,
el bosque festeja,
y final de la historia...

caperucita dos

Había una vez
en un lugar encantado
una niña que tenía
un tapado colorado.

En un bosque alejado
se encontraba un lobo
hambriento, feroz y enajenado.
al ver a la niña le cambiaría el hado.

La niña caperucita, sale de su casita
trasladando comida para su abuelita
en el camino con un extraño se va a encontrar
olvidando las advertencias de su mamita.

El lobo pregunta -¿Dónde vas Caperucita?
La niña contesta-a la casa de abuelita
porque esta enfermita.

El lobo con su hambre voraz
espera a la niña con su confuso disfraz
Caperucita al llegar pregunta -¿Abuelita, qué rara estás?
El lobo contesta- ¡Acercate un poquito mas!

Caperucita se acercó y el lobo se la comió.
Los gritos un leñador escuchó,
con hacha en mano a la casa ingresó,
salvó a la anciana y con Caperucita se casó.

oda a la caperuza

Pequeña niña con roja caperuza

ha de salir encomendada por su madre

para llevar la canasta preciada.

Ella nunca escuchó consejos

por eso toma el camino más peligroso.

Un lobo a su encuentro llega

para cambiar la ruta de sus pasos.

Maligno se aprovecha de su inocencia,

con artimañas consigue su cometido.

Ventajero, llega primero a destino

la casa de la abuelita.

Emulando a la anciana se disfraza de ella.

La pequeña deconfía de la escena

observa y exclama ¡Qué distinta estás abuelita!

¡Que pelo!

¡Que orejas!

¡Que dientes!

Al instante, Caperucita se transforma en su cena.

Alguien irrumpe...

El leñador, el salvador.

Corta la panza del lobo...


¿qué saberes disciplinares se pusieron en juego para escribir las "caperucitas"?

bibliografía:

Chevallard, Y., “¿Por qué la transposición didáctica” en La transposición didáctica, Buenos Aires, Aique, 1997.

García, Eduardo, “La naturaleza del conocimiento escolar: ¿transposición de lo cotidiano a lo científico o de lo simple a lo complejo?”en Rodrigo, M.J. y Arnay, J., La construcción del conocimiento escolar, Barcelona, Paidós, 1997.

No hay comentarios:

Publicar un comentario